Semana 2

Dentro de mi proceso de adaptación he andado mas que en toda mi vida. Me he perdido más veces de las que nunca podia imaginar y he reconocido cada palmo de mi habitad.

Esta semana he tenido que ir a todas las inaguraciones de la ciudad por obligaciones de la facultad. Me encanta estos homeworks. Además de conocer gente, de aprender mas ingles del que en otros sitios podría hacer, me dan de comer. Asi que durante unos dias no me he preocupado para nada de la cena.

Cada una de las exposiciones tenía un encanto especial y una pequeña decepción. Unos por la exposición en sí, otras por el entorno. Pero de todas maneras, esto es otra historia. Cada cosa tiene sentido y se estructura perfectamente con el contenido. La primera de ellas era la nueva inaguración del IKON. Para los olvidadizos, esta era la galeria de la que formaba parte hace años. Una presentación espectacular, con banda de musica incluida, en un centro preparado para la ocasión (una fabrica abandonada de la ciudad). Fue una inaguracion muy atractiva a los ojos y muy satifactoria al paladar. Lastima que mi compañero de piso, que decididio acompañarme ese dia, montara el pollo al tomarse una cerveza más de la debida.

http://www.ikon-gallery.co.uk/

La segunda exposición tuvo lugar en la galería de la facultad. La idea del artista era brillante pero la escaseaba material y me sabia a poco la verdad. Por suerte los sandwiches estaban buenísimos.

www.internationalprojectspace.org

El Jueves estuve en otra exposición en el norte de Birmingham. Despues de tres cuartos de hora en autobus, descubrí que en tren llegaba en diez minutos.... Lo que hace la inexperiencia. En mitad de un barrio tremendamente conservador aparece este edificio de contemporaneas estructuras pero con el mismo espiritu que su alrededor. La exposición tenía buenas intenciones pero parece que olvidó que quería decir a mitad de camino.

http://www.artatwalsall.org.uk/

Y para colofón final la exposicion de Compton Verney. Tras una hora en el tren de camino a londres, nos esperaba un miniautobus de lujo que se perdia en la Countryside. Y allí, en medio del bosque, estaban las puertas de hierro forjado que nos conducia, a traves de praderas de película, a una casa señorial digna de un gentleman de epoca victoriana. Menuda casa!, teníais que verla. Por dentro y por fuera se respiraba inglaterra. Cuando llegue allÍ tenía que enseñar mi invitación y antes de decir una palabra me reconocieron por mi nombre. Fah, mi compañera de clase tailandesa, y yo eramos las unicas estranjeras del lugar. Todos eran rubios o canosos, todos llevaban pajaritas y todas llevaban trajes de cocktel para la ocasión (excepto los artistas que son unos estravantes). Champan, canapes, alcaldes y demas polÍticos, se confudian entre las paredes de esta gran mansión. La exposición no importaba en comparación al espectáculo.

http://www.comptonverney.org.uk/?page=home

En definitiva, placeres para la vista y para el gusto.

A pesar de todo esto. Me he tirado toda la semana pateandome la ciudad en la captura de un trabajo. Aparentemente con brillantes resultados porque el martes empiezo en un restaurante francés justo en el centro de la ciudad. Asi que, si todo sale bien el martes, se puede decir que mi integración ha sido satifactoria y completa.

EL PROCESO DE ADAPTACIÓN HA FINALIZADO...